La corporación municipal pontenovesa clausuró, la semana pasada, la última sesión del mandato vigente con la decisión de expropiar una finca aledaña al polideportivo, sobre la que se edificará un centro de día, con capacidad para albergar a unas 40 personas mayores y que tendrá hasta 30 camas de régimen residencial. La expropiación le supondrá un desembolso de 40.000 euros al gobierno local, que califica esta actuación de «necesaria e urxente».
El regidor pontenovés, el socialista Darío Campos, aclaró que «xa había unha finca cedida por parte dun propietario particular para esta finalidade, pero sobre a outra, descoñécese quen é o dono por datos inexactos do catastro», por lo que el gobierno tendrá que ir a una «expropiación forzosa do terreo». De esta forma, el futuro centro de día ocupará una superficie de unos 2.500 metros cuadrados. El primer edil añadió que, una vez expropiada la finca, «cederáselle ó Consorcio dos Servizos Sociais para poder negociar o financiamento coa Xunta e poder así executar a obra canto antes».
De esta forma, el equipo de gobierno de los socialistas de A Pontenova avanza en el que fue uno de sus principales objetivos, el de cambiar la ubicación planteada por la alcaldía anterior, «a un lugar con máis área de esparcimento» y responder a la demanda existente de este servicio.
Saneamiento
Para hacer llegar las tuberías de la traída del agua y del saneamiento a núcleos de población que carecían de ello, el regidor aprobó la expropiación de «terreos de paso para que poidan pasar por eles as canalizacións». Las obras, «que estarán finalizadas este verán», beneficiarán a ocho vecinos de Conforto y a cuatro casas de Fontangordo, adonde, en un periodo estival de hace dos años, fue necesario acercar motobombas para poder suministrarles el agua, que faltó durante tres días. En este sentido, el primer edil puntualizó que de este modo «complétase o 5% que quedaba do proxecto do saneamento».
Fuente: El Progreso
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