Fuente: La Voz de Galicia
Industrial Recense y la antigua fábrica de carrocetas IPV representan la cara y la cruz de la industria pontenovesa. La primera está en plena fase de expansión, con nuevos productos y mercados. La segunda sigue parada, a la espera de un dinero que no llega de Venezuela prometido por los nuevos propietarios.
Ayer, Recense divulgaba un comunicado en el que daba cuenta de su alianza con otras 31 empresas gallegas para participar en concursos internacionales de proyectos de construcción y mantenimiento de parques eólicos marinos. Este frente industrial, denominado Galician Offshore Energy Group (GOE), en el que colabora aportando su experiencia Navantia, «explorará oportunidades en los principales mercados de la eólica offshore, como el Mar del Norte», indicaba Recense.