N-640: ¿CARRETERA O CAMINO?

Las protestas por el mal estado de esta vía entre Rozas y A Pontenova se suceden. El
tramo entre Meira y la villa del Eo tiene una altísima siniestralidad. Tanto es así que los profesores del IES ‘Enrique Muruais’ de A Pontenova han iniciado la recogida de firmas para pedir la mejora del firme y más medidas de seguridad. En la N-640 entre Rozas y A Pontenova, el asfalto mojado y con manchas de aceite convierte la calzada en un aliado letal, al que se une en Marco de Álvare la presencia de reses mostrencas sueltas. La carretera depende de Fomento, que recientemente acabó una obra en Rozas para eliminar un punto negro, en el cruce con la vía de Rozas a Abadín.

Una agrupación con alcaldes de cuatro partidos distintos.

La comisión dinamizadora del GDR-3 la integran los alcaldes socialistas de A Fonsagrada, A
Pontenova, Pol y Negueira de Muñiz, el independiente de Meira, los populares de Baleira
y Ribeira de Piquín, y el nacionalista de Riotorto.

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Además,
pertenecen a ese grupo
organizativo: Carmen García
Sal, de Baleira; Rosa Rois, de
Ribeira de Piquín; Luz Rosell,
de Negueira de Muñiz; Carlos
Bermúdez, de A Pontenova, y
Manuel Núñez Monxardín, de
A Fonsagrada. A su lado están:
Lois Taboada, de A Fonsagrada;
Óscar Iglesias, del SLG de
Meira; Begoña Sobrado, del
SLG de Meira; Dora Cabaleiro,
del SLG; Gustavo Fernández,
de Ribeira de Piquín; Yolanda
Fernández, de Riotorto; Carmen
Darriba, de Piquín, y Salvador
Ronda, de Negueira.VOLVER

El antiguo trazado del ferrocarril, de más de 30 kilómetros, se habilitará como senda turística.

(Un tren de mineral pasa sobre el viaducto de Rego da Viña, en 1910).

Entre los años 1903 y 1964, la línea de ferrocarril de Vilaodrid sirvió para transportar el mineral de hierro procedente de los yacimientos de este municipio —ahora integrado en A Pontenova— hasta el puerto de Ribadeo, donde se cargaba en barcos para su distribución. Se trataba de un ferrocarril de vía estrecha de
unos 34 kilómetros de trayecto, justo el que ahora se pretende recuperar como recorrido turístico. Además de tren minero, a partir del año 1905, se habilitó un
servicio de transporte de viajeros. Las estaciones se encontraban, además de en las localidades de los extremos de la ruta, en Porto y San Tirso de Abres.

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El proyecto de recuperación de la
ruta del ferrocarril minero es una antigua
demanda de los alcaldes de la
zona. Recientemente, se estudió la
posibilidad de retomarlo dentro de
los planes de actuación de la reserva
de la biosfera Eo-Oscos-Terras de
Burón, de reciente creación. En este
contexto, se barajó la posibilidad de
extender el proyecto de recuperación
de sendas desde la costa hacia
la montaña lucense, para crear una
red de caminos rurales.

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