Sospechan de la desaparición de bienes de la parroquia y de donaciones de fieles

A Xosé Anxo Fernández de poco le ha servido disculparse por el malestar suscitado cuando su única intención fue -insistió-poner lo más bonita posible a la Virgen para la novena que se inició el domingo, y que culminará el día 8 con la fiesta mayor en el santuario. De nada le ha valido reconocer el error de no haber pedido permiso a Patrimonio para la reparación de la imagen, ni que disculpase los incidentes del viernes. Tampoco ha influido el comunicado del Obispado de Mondoñedo-Ferrol de ayer, en el que llama a la serenidad y a obrar en coherencia «con la fe cristiana que practicamos». El Obispado no alberga dudas al manifestar que los dos párrocos obraron de buena fe. Pese a todo ello, los feligreses piden que deje la parroquia, pues se ha quebrado la confianza que tenían en él desde su llegada, hace algo más de un año.
Dicen que sospechan de la desaparición de bienes de la parroquia y de donaciones de fieles; les reprochan que reparasen la talla de la Virgen sin informar a nadie, y niegan que el viernes se produjesen agresiones.
En consecuencia, piden que de forma inmediata se inicie una investigación independiente para esclarecer los hechos que denuncian; que se nombre otro sacerdote para oficiar los actos de Nosa Señora, que culminan el día 8, evitando la presencia de los párrocos de A Pontenova y Riotorto «xa que a súa presenza pode ser fonte de conflito»; que se tramite la sustitución definitiva del párroco de A Pontenova y que el de Riotorto no lo vuelva a sustituir en Conforto, y que se garantice la seguridad del patrimonio parroquial, con un museo de arte sacro de gran valor.
El cura de Riotorto denunció ayer a dos vecinos por injurias y agresión