Las leyendas de 'El grial de Ancares' podrán verse en el salón de casa con Telelugo
A partir de este viernes 5 de abril Telelugo emite la serie ‘El grial de Ancares’, rodada en siete municipios lucenses (Baralla, Becerreá, Cervantes, Navia de Suarna, As Nogais, Pedrafita do Cebreiro y Triacastela), y ocho leoneses (Balboa, Barjas, Candín, Corullón, Oencia, Peranzanes, Sobrado, Trabadelo, Vega de Espinareda, Vega de Valcarce y Villafranca del Bierzo).
‘El grial de Ancares’ realiza un recorrido histórico y turístico alrededor de esas montañas, plasmado en trece capítulos de reportajes y docudrama. Se emitirá cada semana en varias franjas horarias, con el estreno de las nuevas entregas los viernes a las 22.00 horas.
La serie fue una producción de Lugopress / El Progreso para la Red Rural de Desarrollo Ancares. Fue realizada por Yago Mazoy, con guion y dirección de José de Cora al frente de una veintena de actores. En ella se siguen los pasos del director cinematográfico Robert Norton durante su visita a Ancares, donde localiza escenarios con destino a una película.
Esta ficción permite a Norton —encarnado por Gonzalo Paradela— conocer el paisaje de los quince municipios montañeses, a los que viaja en compañía de una guía local, que será María José Gómez.
En cada capítulo se recogen los aspectos más curiosos, amenos y desconocidos de su historia, etnografía y arte, así como la belleza de su espectacular patrimonio natural y ecológico.
‘El diablo pontífice’
El recorrido del primer capítulo comienza por tierras de Baralla, el antiguo municipio de Neira de Xusá, donde tienen su asiento blasonadas casas señoriales, como la casa torre de Vilameixe, el pazo de los Osorio, en Santiago de Aranza o la casa torre de Basille, residencia de la familia Díaz Moreno.
Esta última visita se centra en Tello de Neira, inmortalizado por Lope de Vega como el personaje de Sancho en su comedia ‘El mejor alcalde, el Rey’.
Visitan también el monasterio de Santa María, de San Lourenzo de Penamaior, donde la historia de los bernardos se entrecruza con la figura de san Virila. A Penamaior corresponde la custodia de un lignum crucis de imposible datación, que sirve para iniciar el relato dramatizado de las leyendas.
En Furco son informados de una medida de longitud así llamada, que se determina por la que hay entre las puntas de los dedos meñique y pulgar de una mano extendida. Con el fin de que el furco no sufra alteraciones, se graba en casas e iglesias.
Otros lugares visitados son Santa María de Cascallá, San Xosé do Cereixal y Pontes de Gatín, con su leyenda del Diablo pontífice que da título al capítulo.
El Progreso