La campaña que varias asociaciones emprendieron hace varias semanas contra el proyecto de construcción de una central eléctrica en el Eo a su paso por Ribeira de Piquín empieza ya a ofrecer pasos concretos. La sociedad de pescadores Rodeo, con sede en ese municipio aunque con integrantes en varios, y el Centro de Iniciativas Turísticas (CIT) de A Pontenova recogieron unas mil firmas de apoyo, que ayer se mandaron a la Confederación Hidrográfica del Cantábrico con las alegaciones redactadas contra el proyecto, sometido en estos momentos a estudio de impacto ambiental.
El presidente de Rodeo, Alberto Carballal, destacó además que las firmas se habían logrado en diversos concellos. No es la última medida de protesta, puesto que mañana -antigua escuela, seis de la tarde- se celebra una asamblea informativa en la que se expondrán a los asistentes diversas cuestiones relacionadas con la construcción de la central y sus posibles consecuencias.
Petición de caducidad
Por otro lado, la Asociación para a defensa ecolóxica de Galicia (Adega) ha presentado alegaciones en las que reclama la caducidad de la concesión para esa central. Según recogía ayer Efe, la asociación subraya que el proyecto está ubicado en una zona que es Reserva de la Biosfera y entra en la Red Natura.
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