Clamor contra una hidroeléctrica en el Eo que se quiere recuperar tras 88 años

Tras la manifestación de unas 400 personas en A Pontenova, ahora se creará una plataforma ciudadana

Los ribereños del Eo y los ecologistas están en pie de guerra contra el proyecto de una central eléctrica en Ribeira de Piquín. La manifestación del domingo en A Pontenova, que reunió a unas 400 personas, da prueba de ello. Entre los participantes estuvo Adega, quien también ha alegado contra el proyecto y el estudio de impacto ambiental. Lo que la Confederación Hidrográfica del Cantábrico está tramitando es una solicitud para recuperar el derecho de concesión y la declaración de utilidad pública de un aprovechamiento hidroeléctrico del río que fue autorizado en el año 1922. Los críticos con la obra sostienen que este dato resta cualquier legitimación al proyecto, entre otras cuestiones porque el Eo está ahora en una Reserva de la Biosfera y es un Lugar de Interés Comunitario. Además, la población de salmón está más amenazada que nunca. Por ello alegan que la caducidad de la concesión debe ser definitiva.

Desde que se supo del proyecto se inició un movimiento ciudadano que ha ido a más. Surgió con la asociación O Rodeo de Ribeira de Piquín y el Centro de Iniciativas Turísticas de A Pontenova, con las inmediatas adhesiones de los dos alcaldes.

¿Qué está en juego? Con este proyecto se pretende captar algo más de diez mil metros por segundo de agua del río Eo, entre As Insuas y el lugar de Mende, en Ribeira de Piquín. «Este proxecto é orixinario dunha concesión de hai 88 anos a favor de José Otero Pereiro, época na que se iniciaba a expansión da enerxía eléctrica da man de persoas emprendedoras, -nada que ver co actual monopolio das compañías eléctricas-. As obras deste aproveitamento foron iniciadas no seu día, pero non pasaron da construción da presa de captación, da que se conservan restos», dice Adega..

«Se naquel momento -añade el colectivo ecologista-, cando aínda os pobos de Meira e Ribeira de Piquín non dispoñían de enerxía eléctrica, esta concesión cunha potencia de 3.929 kw podía estar xustificada, hoxe carece de toda lóxica: os nosos ríos están sobre explotados e Galiza é excedente en enerxía eléctrica, polo que temos pagado xa impactos dabondo».

Más datos, que aporta Adega: la infraestructura de la central afectaría a un tramo de 12 kilómetros del río y a 233 parcelas de vecinos, con una superficie total de 117.200 metros cuadrados.
Fuente: La Voz de Galicia

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