Fuente: La Voz de Galicia
La feria de artesanía y antigüedades de A Pontenova, del 8 al 10 de diciembre, alcanzará su undécima edición posicionada como un referente del sector y también para centenares de personas que acuden a la villa pontenovesa desde hace años a ver y comprar piezas que se muestran. Es un fin de semana de puente festivo en el que A Pontenova ofrece multitud de alicientes que justifican una visita, comenzando por la propia feria, que este año reunirá a 60 anticuarios y artesanos procedentes de diferentes puntos de España, Francia y Portugal.
«Con esta cita queremos poñer en valor a nosa fonda tradición no sector das antigüidades, pois a nosa vila foi o lugar de encontro de anticuarios de toda Europa na procura de pezas rústicas e tadicionais. Con esta feria, aproveitamos a nosa riqueza cultural para xerar oportunidades económicas no Concello», manifestó el alcalde de A Pontenova, Darío Campos.
Y lo hizo poniendo sobre la mesa un dato relevante: las 8.000 personas que se estima visitaron el año pasado A Pontenova durante el evento.
El programa de este año incluye desde las habituales demostraciones en vivo de oficios tradicionales hasta una exposición con 120 piezas de olería y bargueños del siglo XVII. Además, establecimientos hosteleros servirián menús especiales al precio de 15 euros por comensal, y se organizará una ruta reivindicativa en vespa por la senda verde, para demandar al gobierno central la recuperación y puesta en valor del antiguo trayecto del tren minero.
La Diputación colaborará con la feria con 5.000 euros. Igual cantidad aporta el Concello de A Pontenova. Y el Concello de Pol presta la carpa donde se instalarán los expositores.
