En la frontera entre Asturias y Galicia se encuentra el río Eo, un río que hace en muchos de sus tramos de frontera natural entre las dos comunidades, desembocando en el cantábrico formando la Ria de Ribadeo.
Desde 2007 esta comarca ha sido incluida en la Reserva de la Biosfera por la UNESCO, en total esta designación afecta a un territorio de 1.600 kilómetros cuadrados ocupados por 14 municipios (siete asturianos y siete gallegos), en los que el río Eo sirve de nexo de unión entre los dos territorios.
En esta comarca la minería trajo en el siglo XIX un tren minero que recorría un trayecto entre Villaodrid (hoy en día A Pontenova) y Ribadeo, donde existía un embarcadero para llevar el mineral hasta los barcos que transportaban el material. El recorrido fue utilizado también como transporte de personas, hasta que en 1964 se detuvo la actividad minera y el tren dejó de funcionar.
Esta ruta se puede hacer también andando si se dispone de dos vehículos, dejando uno al final de la ruta, ya que si no tendríamos que hacer 24km.
La parte más “bonita” o “natural” es la parte
asturiana, ya que en Galicia han asfaltado la vía y se ha convertido en carretera, por lo que, aunque no tiene mucho tráfico, podemos encontrarnos con coches en este tramo y deberemos extremar la precaución.
Aunque la ruta se puede hacer en los dos sentidos, nosotros decidimos comenzar en San Tirso de Abres (Asturias) y finalizar en A Pontenova (Lugo), donde podremos disfrutar de los restos de la antigua mina de hierro y de los hornos. Hoy en día están restaurados y la zona la han reconvertido en un enorme parque, así como la antigua estación que ahora es la oficina de turismo.
También cerca de San Tirso de Arbes, justo antes de donde comienza la vía, podemos encontrarnos un túnel del trayecto y un vagón convertido en oficina de turismo de la zona.
La vía terminaba en Ribadeo, pero lamentablemente desde San Tirso de Arbes la vía no esta habilitada y se pierde en muchas ocasiones, haciendo imposible realizar ese tramo. Aún así recomendamos la visita al “Cargadeiro” de Ribadeo. Está rehabilitado y se tienen desde allí unas bonitas vistas de la Ria.
Durante el trayecto tendremos que cruzar varios túneles, algunos bastante largos. Aunque tienen instalada iluminación, no siempre funcionan y estos túneles a oscuras pueden ser algo peligrosos. Por lo tanto recomendable una linterna o iluminación en nuestra bicicleta.
Saliendo de San Tirso de Arbes hacia la N-640, nos encontramos con un estrecho camino que es donde comienza la vía. En principio vamos junto a casas que se encuentran en la zona. Si somos curiosos y nos fijamos un poco, veremos que una de esas casas era la antigua estación, que hoy es una vivienda privada.
Muy poco después de pasar las últimas casas, ya tenemos que cruzar el primero de los túneles. Tras pasar este primer túnel nos encontramos los restos de una antigua central hidroeléctrica construida en 1932 para dar servicio a una fábrica de vidrios ópticos. Según cuenta un cartel situado en la zona, la fábrica nunca llegó a funcionar y esta central se usó para dar electricidad a varios pueblos de la zona.
La visita es muy interesante ya que podemos observar los antiguos saltos de agua e incluso la maquinaria de marca Siemens que todavía se encuentra en el interior.
Todo el recorrido vamos junto al río Eo, unas veces ácerca de su curso y otras veces un poco más alejados. También recorremos casi el mismo trayecto que la N-640 que tendremos que cruzar en un par de ocasiones sin mucha visibilidad, así que deberemos ser precavidos.
Tras unos cuantos km recorridos y pasados varios túneles, nos encontramos con un antiguo puente del trazado ferroviario que tenemos que usar para cruzar el río. En el puente aún se pueden ver las traviesas que han cubierto con planchas de Tramex para darle más seguridad al paso.
Cuando vamos más o menos a mitad de la ruta, sale una pista a nuestra derecha que nos lleva a una presa. En esta presa encontramos una construcción curiosa construida para ayudar a los salmones a salvar el obstáculo de la presa y que puedan continuar su camino río arriba.
Tras el pequeño descanso, volvemos a la vía verde y nos encontraremos con el túnel mas largo del recorrido con 233 metros de longitud.
En algunas zonas de este tramo se intuyen donde estaban las traviesas del tren por los surcos que han quedado en el camino. También nos encontramos con zonas donde el balasto (piedras que se suelen poner en las plataformas ferroviarias) todavía es visible y esta bastante suelto. Hay bastantes baches en algunas partes del recorrido pero no suponen problema alguna si circulamos con precaución.
Ya estamos llegando al final del tramo asturiano y nos encontramos un cartel que nos lo indica. Todavía quedan 6 km de recorrido hasta A Pontenova y deberemos extremar la precaución ya que como indicamos anteriormente este tramo es compartido con vehículos a motor.
El recorrido restante no tiene más túneles aunque seguiremos teniendo restos de casetos y construcciones que existían a pie de la vía.
En esta zona encontramos algunas zonas recreativas con barbacoas donde poder descansar.
Finalizamos el recorrido llegando a la localidad de A Pontenova. Atravesamos la localidad siguiendo las calles que seguían el antiguo trazado del tren y llegaremos a las antiguas minas de hierro. Origen de este trazado ferroviario.
Allí podremos visitar los antiguos hornos donde limpiaban el hierro de impurezas y lo preparaban para cargarlo en los trenes que lo llevaban a Ribadeo, donde en el ”Cargadeiro” cargaban el mineral en los barcos que fondeaban en la Ría.
Y este es el fin del recorrido, la vuelta la realizamos por el mismo camino pudiendo disfrutar una vez más de estos bonitos paisajes y de la tranquilidad de los bosques que atravesamos.
Información de valoración
Tipo de marcha: ida y vuelta
Distancia: 24,4 Km
Desnivel subida: 364 m
Desnivel bajada: 364 mAltitud Máxima: 107 m
Época recomendada: Todo el año
Tipo de Terreno: Pista pedregosa algunos tramos por carretera.
Tipo de Terreno: Pista pedregosa algunos tramos por carretera.
Track para GPS(formato GPX):
