Si no tapan los baches, al menos que los hagan visibles.
Esto es más o menos lo que han debido pensar los dos estudiantes de
la Universidad Politécnica de Milán. Bueno, para ser
estrictos, se han inspirado en la forma de actuar que tiene el cuerpo
cuando sufre una herida, pero la finalidad es la misma.
Domenico Diego y Cristina Corradini son los
precursores de lo que ellos mismos han denominado “Street Safe
Initiative”. La idea es bastante sencilla y simplemente se
trata de colorear la penúltima capa de asfalto anterior a la de rodadura
para que en caso de que se forme un bache sea más visible.
Está claro que lo ideal sería que subsanasen el problema pero de
esta forma, al menos, podremos verlos desde lejos y esquivarlos. Aunque
conozco alguna carretera en la que el asfalto pasaría a estar
completamente amarillo.
Se comenzarán a realizar las primeras pruebas sobre el terreno en
las afueras de Milán, concretamente en la ciudad de Rho,
la misma localidad donde se celebra el EICMA
(Salón de la Moto de Milán). ¿Será casualidad o estarán
preparando el terreno para más adelante?
De todas formas, ya han salido los primeros detractores como
el señor Mike Conway, Director General de FM Conway (empresa dedicada
al mantenimiento de carreteras). Según sus propias palabras, habría que
reformar el adhesivo que utilizan entre capa y capa de asfalto para
hacerlo amarillo en vez del negro que se usa en la actualidad. Pero,
¿será tan difícil?
Sin embargo, otra gente ha llegado más allá e incluso especula con
la posibilidad de incluir pigmentos reflectantes en
esta pintura para hacerlos también visibles por la noche. Sin embargo,
como en la mayoría de las cosas, la mejor solución sigue siendo la más
sencilla: arreglarlos.