El
estado del firme y la señalización de las tres carreteras nacionales,
arterias de conexión de A Mariña, es objeto de quejas diarias por los
miles de conductores que transitan a diario por la N-640, la N-642 y la
N-634. Las administraciones parecen darle la espalda a un problema que
se agravó tras las intensas lluvias registradas en la comarca durante
el penúltimo fin de semana de enero.
Antes de
esa fecha, la Asociación Cultural e Deportiva As Minas, de A Pontenova,
ya había iniciado una recogida de firmas para protestar por el
deterioro que presenta el firme en algunos tramos de la N-640, conexión
del occidente astur con A Mariña Oriental y con la capital lucense. El
colectivo recaba también apoyos a través de Facebook . A fecha
20 de enero ya habían registrado más de 600 firmas. También el BNG
exigió a Fomento con una concentración la mejora del vial.
El
desarrollo empresarial y turístico de la comarca, limitado por la
demora en la llegada de la A-8 y del corredor costero, se ve lastrado
por el deficiente estado de la red viaria. La N-634, conexión principal
de la zona centro de A Mariña con Lugo y las grandes urbes gallegas,
padece los daños del abandono y soporta el tráfico de camiones que
trabajan en la construcción de los nuevos tramos de la A-8. El firme
está intransitable y los baches se suceden, lo que obliga a limitar la
velocidad.
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