La derrota del pasado sábado ante el Coruxo F.C.
(4-5) ha dejado muy mal sabor de boca en el seno del Superti-A
Pontenova. Pasados ya cuatro días desde el choque, el descontento en el
técnico de los pontenoveses era todavía palpable ayer. «Estoy
decepcionado porque la actitud que tuvimos no fue la adecuada para un
partido en el que nos jugábamos tanto. Hasta uno se pone de mal humor al
pensar que no somos capaces de mostrar la actitud necesaria para sacar
adelante un encuentro de estas características», manifestó apenado
Josiño.
El cuadro local estuvo prácticamente ausente
durante 33 minutos de partido y solo reaccionó en el tramo final, cuando
los vigueses ya vencían por 0-5. «Se demostró que con un mínimo de
actitud y compromiso conseguimos meternos el partido y tuvimos opciones
incluso de empatar, aunque sería totalmente inmerecido ya que el rival
hizo todos los méritos para llevarse el triunfo», admitió.
Josiño indicó que este partido había sido el
ejemplo «de una trayectoria que venimos arrastrando desde principios de
este año, pero que los resultados han ido enmascarando», al tiempo que
aseguró que el equipo ya analizó la situación en el entrenamiento del
lunes y entre todos concluyeron que la causa principal era cierta «falta
de cohesión en el grupo grupo, que ya estamos intentando solucionar
unidos y aguardamos que el partido ante el Coruxo haya sido un punto de
inflexión», matizó.
Tras esta derrota, la visita de este sábado a la
pista del Cistierna toma una dimensión mayor para el preparador
pontenovés en la lucha por lograr la salvación: «Ellos vienen de ganarle
al Torre de los Reyes y se nos han aproximado, pero nosotros estamos en
mejor posición que ellos y tenemos que saber gestionar bien esa
situación durante el partido», señaló.