En A Mariña se registra el porcentaje más elevado de Galicia en lo que a consumidores abusivos de bebidas alcohólicas se refiere, con aproximadamente el 19% de la población.
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La comarca se encuadra entre las de menos riesgo de toxicomanías por el uso de estupefacientes.
Los mariñanos se declaran los más favorables de Galicia a sancionar a quienes consuman drogas en lugares públicos. Ese rechazo se da en una comarca que figura entre las de menos riesgo de toda la comunidad autónoma por la presencia de estupefacientes en la sociedad. Son algunas de las conclusiones del estudio O consumo de drogas en Galicia, financiado por la Consellería de Sanidade, de periodicidad bienal y basado en encuestas aleatorias realizadas en nueve de los quince municipios de A Mariña.
A los consultados se les preguntó si se debería permitir o sancionar el uso de drogas, tanto en espacios públicos como privados. En el primer caso, los mariñanos coinciden con la actitud mayoritaria en el resto de Galicia, aunque sobresalen, por encima de la media, hasta el punto de situarse como los más proclives a las medidas restrictivas. Pero en el ámbito privado se muestran más permisivos con el consumo de estupefacientes, aunque alrededor de dos tercios están en contra. En el conjunto de Galicia, hombres y jóvenes muestran las actitudes más tolerantes, mientras las mujeres de edad y las personas de edad media o mayores son las más beligerantes.
El factor población
El estudio también evalúa el índice de riesgo para el consumo de drogas, incluyendo el abuso en la ingesta de bebidas alcohólicas y los fumadores habituales. Una estimación basada en la presencia de las trece sustancias analizadas en la sociedad, de tal modo que se tienen en cuenta como factor relevante cuando su uso se considera importante o, lo que es lo mismo, cuando se aproxima o supera la media autonómica. A Mariña se sitúa entre las de menor riesgo, acercándose o sobrepasando la media en consumidores abusivos de bebidas alcohólicas, de tranquilizantes, de hipnóticos y de cocaína.
A partir de esos datos, y como uno de los objetivos del análisis también es establecer las prioridades de intervención sanitaria en función de cómo afectan a la población las drogas legales e ilegales, la comarca se encuadra entre las menor prioridad. Los autores destacan el factor población a la hora de valorar la incidencia de las drogas, de tal modo que la magnitud del colectivo social perjudicado está ponderada por el número de habitantes. Y la comarca representa el 2,66% de todos los ciudadanos gallegos mayores de 12 años.
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